De esa cosa llamada amor y otros bailes con olores de la infancia

Existen momentos en la vida en los que basta con un gesto, una mirada, un pequeño movimiento para poder volver a recordar...

Un olor, un sabor, una postura bastará para dejarnos llevar por las sensaciones. Esas que nos transportan a momentos ya vividos, bajo el código que sólo saben descifrar una pareja de cómplices...



Love is forever. El amor es para siempre. Todo un flashback hasta la infancia que consiguen materializar, a través de un cómplice baile a duo, un olor y una canción. Una curiosa campaña de KFC para su delegación en Johannesburgo. Y es que se ha optado aquí por la emotividad y las sensaciones, antes que por la mostración explícita del producto en la parrilla, para difundir la típica comida rápida estadounidense por tierras de Sudáfrica.

Claro está que la elegida canción forma parte del juego. De todos es sabido que la música tiene el don de la ubicuidad. La única capaz de trasladarnos en el tiempo y hacernos rememorar nuestros mejores momentos. Esos que en pareja recordamos al escuchar "nuestra canción". Y precisamente no es otra la elegida que la que lleva por título Your song, interpretada por la británica Ellie Goulding. Que con el permiso de su original autor e intérprete, Sir Elton John, hiciera ella una versión de la misma más candorosa y femenina...



Después del visionado, resultará curioso y juguetón encontrar la referencia identificativa. Esa que sólo nos permite adoptar, la magia del Cine con su continuo proyectar. Al igual que Your song fuera de nuevo mundialmente conocida 31 años después, tras su versión cinematográfica en Moulin Rouge, dirigida por Baz Luhrmann en 2001; ahora el "viaje en el tiempo" para KFC, nos referencia a un "benjamín". Como a la "pequeña" niña/anciana al final del spot, podíamos ver en El curioso caso de Benjamin Button, de David Fincher (The Curious Case of Benjamin Button, 2008) cómo un anciano vivía su azarosa existencia al revés, rejuveneciendo hasta la niñez a lo largo de los años junto a su "envejecida y normal" amada. Pero más curioso resultaría apuntar, que en la película la amada mujer protagonista es bailarina...

Qué duda cabe que ahora el mensaje se extrapola hacia la longevidad del producto. Que no es otro que el famoso pollo frito de Kentucky, preparado desde 1930 entre fogones y variadas especias por el coronel Sanders. Algo que despedirá siempre un olor característico, permitiendo a nuestra anciana protagonista rememorar su vida con su amada pareja. Pero aquí la expresión del "amor es para siempre" se fusiona en dual idea: la del amor verdadero entre personas y roles sexuales; y la del posible amor al producto alimenticio, que sólo enamora a narices y estómagos, convertidos aquí en sensaciones placenteras, capaces de transportarnos hasta la niñez.

"I'm hungry". Tengo hambre, estoy hambrienta. Es lo que dice la niña/anciana al final de su particular y "viajero en el tiempo" baile. Algo que aquí nos permite seguir jugando con las sensaciones humanas. Con las formas de entender el mensaje. Ese mismo que permite a la anciana transportarse en su viaje emocional hasta la infancia. En el que al final, que no es más que el principio de la historia de amor de la pareja, ella está hambrienta. Y es que como muestra la propia pegatina de la marca, "casualmente" pegada en un mueble de la habitación, esa comida/sensación/amor/canción/baile es algo "so good"...

Para tu imaginación quedará entonces discernir de qué estará hambrienta la bailarina y juguetona protagonista, quien ya no tiene nada de niña, ni edad para jugar...
Tal vez sea del rebozado y crujiente pollo frito...
Tal vez, de su eterna pareja y ansias por amar...

4 comentarios:

ahora o nunca dijo...

Siempre grandes entradas.. con grandes spot. Que pasada de los mejores spot que he visto.

Saludos.

ooOJotaEmeOoo dijo...

Cris, eres un solete. Gracias ;) Pero lo mejor es saber que a través de la lectura de estas entradas, puedas encontrar respuesta a ciertos momentos de la vida, aunque sea "viajando en el tiempo", y los compartas... :))
Saludos.

Rosa María dijo...

¡Qué spot más bonito y conseguido! Es uno de esos ejemplos en los que las emociones se fusionan entre las sensaciones vividas. Una forma muy útil para rememorar buenos recuerdos... y productos ;)
Abrazos.

ooOJotaEmeOoo dijo...

Rosa María, de eso se trata. Emociones surgidas a través de cómplices códigos, que junto a nuestros sentidos, logran descifrar "esas gratas sensaciones" revividas.
Un abrazo ;)