Nunca un Michelin hizo tanto por tan poco

De todos es sabido que a partir de cierta edad el miedo se acrecienta en nuestros cuerpos cuando dejamos de crecer a lo alto, para pasar a hacerlo a lo ancho, sin remedio. Algo que  muchos de vosotros ya sabréis por experiencia: ese proceso en el que la curva de la felicidad se convierte en "michelines" alrededor de nuestra holgada cintura. Curiosa palabra, esa de "Michelín", de tanta resonancia y particularidad, que a lo largo de los años se coló sin esfuerzos en nuestra extensa lengua española, para designar las vueltas de tan rollizas carnes, cual ruedas del muñeco Michelin parecieses.

Es tal la fuerza de la marca Michelin y el simpático muñeco que la ha identificado a lo largo de los años, que se convirtió en palabra de cambio normalizador, para indicar que una persona está "entradita en carnes" o luce sin tapujos sus redondas lorzas. Algo que viene a designar la fuerza de la palabra, donde el significante se convierte en significado, y la connotación se plasma en denotación. Aunque no por ello vamos a olvidar lo que verdaderamente identifica a Michelin: esa fundamental rueda neumática que hace posible circular a nuestro automóvil.

La cuestión es que en esto de la circulación es importantísimo disponer en nuestro vehículo de unas ruedas en óptimas condiciones, las cuales no sólo se encargarán de que nuestro coche ruede convenientemente, sino que además, nos ayudarán a ahorrar.

Pero lo mejor de todo viene, nunca mejor dicho, "rodado" cuando además de velar por nuestra seguridad, Michelin nos enseña a combatir contra el carburante y sus nocivos efectos en el Medio Ambiente. Se trata de ganar la batalla y realizar la ecoconducción.  Un combate al que, sin ninguna duda, a todos nos interesa unirnos.

Pero si aún dudaras de lo aquí expuesto, o presentas algún miedo ante el asunto, no tienes más que pasarte por la interactiva web UNETE AL COMBATE, donde podrás aprender buenas recomendaciones para adquirir unos neumáticos adecuados y, lo mejor de todo, mantenerlos siempre en perfectas condiciones.
En definitiva, te darás cuenta a través de los diferentes juegos interactivos y consejos de la web, que el gasto de carburante que realizas con el coche, está mas ligado de lo que te imaginas con el estado de tus neumáticos. Ante todo, se trata de perder el miedo al consumo innecesario de carburante., que no hace otra cosa que agujerearnos los bolsillos y la sufrida y asfixiada capa de ozono. 

En estos tiempos de Crisis Económica, la cual nos ahoga a cada día que pasa, no podemos olvidarnos del sentido común: la casa NO se empieza por el tejado, sino por los fornidos cimientos que se fijan y agarran al suelo. Algo totalmente equiparable con la base fundamental que nos permite circular con nuestro coche: la consistencia e importancia de los neumáticos y su poder de agarre en carretera.

Si con todo ello hemos conseguido ahorrar, distraernos un rato, aprender cosas importantes, cuidar el Medio Ambiente, y aumentar los significados de nuestro idioma castellano, no queda más que ratificar lo dicho: nunca un Michelin hizo tanto por tan poco.

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