Telephone, o la provocación de Lady Gaga no conoce límites

"Tenéis muchos sueños..."
"Buscáis la Fama..."
"...pero la Fama cuesta..."
"...Pues aquí es donde vais a empezar a pagar..."
"...con sudor..."

Son palabras de Lydia Grant, el personaje de la profesora de baile más dura y exigente que conoció la televisión en los '80. Las nombraba pausada e impostadamente una tras otra, a golpe de bastón, como letanía que sus alumnos debían grabar "a fuego" sobre sus frentes. Pertenecían al primer episodio de la exitosa serie de televisión "Fama" ("Fame" (1982-87)), de la que se han brindado actualmente tantos musicales, films y programas de fulgurante audiencia televisiva. (La propia serie "Fame" se realizó después del gran éxito que cosechó la película del mismo nombre, dirigida por Alan Parker en 1980, ganadora de dos 'Oscar').

Lydia era la auténtica y exigente profesora. Sus pupilos ansiaban "la fama absoluta". Pero para ello, la sangre en los pies, el sudor en la espalda y las lágrimas en el rostro, debían aflorar primero. Todo para conseguir con el esfuerzo, la máxima expresión artística. Sin embargo, la mayoría de sus alumnos, sólo tenían un objetivo entre ceja y ceja: conseguir el gran sueño: ser centro mediático de las miradas en honor de multitudes. La absoluta "hoguera de las vanidades" del mejor artista que se precie.

Algo que a buen seguro conoce a la perfección Lady Gaga. Producto mediático donde los haya. La cuestión es que ésta artista no hace "nada nuevo bajo el sol". Sabe lucir el palmito como nadie, eso sí. Y cuanto más rocambolesca y disfrazada vaya, mejor. Pero la damisela Gaga utiliza para venderse una de las artimañas mas viejas de la Humanidad: el uso de la provocación desmesurada. Se trata de reflejar el sexo y la violencia al límite de la delgada línea roja que los separa de la calificación pornográfica. En definitiva: del morbo, llevado a sus más altos grados de atracción social. Algo de lo que nadie es capaz de librarse. Algo de lo que nadie es capaz de evitar mirar. El "lobo del Hombre" se asoma a cada instante.

Conociendo esto, "Telephone" es la nueva perla de Gaga. Videoclip a modo de cortometraje, de casi 10 minutos de duración, que le confiere el nombre de Vídeo Musical. Su director, el sueco Jonas Akerlund, bebe de y  "copia" (homenajea sin pudor :) a Tarantino, con personajes que referencian claramente a "Kill Bill" y "Pulp Fiction". Como veis, la Espiral del Audiovisual siempre está presente, como en este propio blog.

Pero la Lady no es tonta. Porque en esta ocasión no luce el palmito sola. Se arrima a buen árbol para vender el producto. Y es que "vuelve a comunicarse" con Beyoncé, uno de los productos actuales que mejor representa la sensualidad del Pop. Anteriormente, trabajaron juntas en la canción y videoclip "Video Phone". Ya sabes, favor por favor se paga. Aunque sea a cobro revertido :)
Valga la gracia y casualidad, que el comienzo de "Video Phone" es "Reservoir Dogs" en femenino singular, capitaneado por Beyoncé. Seguro que Quentin está bien contento. El pop actual no para de referenciarlo.
 
Ahora, ambas divas del pop se enzarzan con "Telephone" en la lucha de venganza contra un  chulo que mete a una de ellas en la cárcel. Aunque, no te lo pierdas: la prisión con la que comienza el vídeo se llama "Prison of Bitches". Con ese comienzo está todo dicho. Porque de eso va el vídeo musical: de sexo, violencia, morbo y provocación. Pecados capitales tan viejos como el Hombre en este castigado Mundo. Pero que atraen a las masas como moscas a la miel.

El vídeo musical "Telephone" es el primero de lo que parece será una serie. Seguro que trilogía, con secuela y precuela. Es lo que priva. Hay que vender bien el producto, según los cánones actuales. 
Sangre, sudor y lágrimas se dan cita una vez más. Porque la Fama cuesta. Y es necesario mantenerla. Aunque lo pagues, antes o después. Es la ley del Candelero.

(Nota: el fenómeno actual del Pop no es excusa para no indicar que este vídeo musical puede ser
no tolerado para menores)


Y ahora, canta y baila al son de la música mientras compartes :) votar

4 comentarios:

:::::: dijo...

Querido JotaEme, te juro que LadyGaga es superior a mis fuerzas, no la tolero, haga lo que haga siento que es una verguenza para la música y para las mujeres en general. Lo siento, tal vez soy drástica pero es una verguenza.
Un besillo

ooOJotaEmeOoo dijo...

No eres drástica, Tani. Eres sensata.
Como puedes comprobar en mi escrito, la ironía forma parte de todo su desarrollo. Mi comparación entre conseguir la "Fama" a través del verdadero esfuerzo, y el éxito obtenido por efectos de efímera disipación, habla por sí sola.
Gaga es la moda actual de la provocación. Después vendrá otr@. Lo que ocurre con esta "damisela" del Pop, es el resultado de una gran campaña de Marketing Mediático: un producto del 'retro Pop' que ha llegado a calar hondo en sus más incondicionales fans. Las Redes Sociales e Internet hacen el resto.
Pienso que el fenómeno 'Gaga' sí te puede interesar para tus estudios de Sociología e internacionalidad. Es una muestra de lo manipulable que es la "masa". (Por cierto, no te olvides referenciarme si lo utilizas :) 1 beso.)

:::::: dijo...

Dalo por hecho querido Jota Eme, te citaré en mi tesis de doctorado "De Madonna a Lady Gaga, o la manipulación de masas a través del pop (1980-2010)"

Muaaack

p.d. Eres un chico o una chica? sorry por ser preguntona

ooOJotaEmeOoo dijo...

Ja, ja, ja. ¿Pero cómo me pregunta eso una futura socióloga? Soy un hombre, claro. ¡He estado a punto de no publicar tu último comentario! ¿Es que nadie mira los perfiles de los bloggers? Nombre, mail, algunos datos... ¿Para qué están si no? Ay, Tani, Tani... Te pongo un negativo y de cara a la pared durante 1/2 hora :))
Además, si del título de tu tésis también tengo que ver, tendremos que hablar más a fondo sobre el tema... Ay, Tani, Tani...